El crecimiento exponencial del programa de atención inmediata virtual de Oregon Health & Science University no sorprende en absoluto a Ira Pollock.
Pollock, un ingeniero electrónico jubilado de Hillsboro, pudo aprovechar el programa el 3 de feb., cuando necesitó atención inmediata después de haber dado positivo en COVID-19. EN un par de horas estaba conectado desde una tablet a un asistente médico de OHSU que inmediatamente le recetó el medicamento antiviral Paxlovid.
“El beneficio principal fue lo rápido y oportuno que resultó”, dijo. “Estoy seguro de que si hubiera tenido que ir al consultorio habría pasado al menos un día, o varios —demasiado como para poder iniciar el tratamiento con Paxlovid a tiempo”.
Pollock, de 73 años, empezó el tratamiento con el antiviral lo suficientemente rápido como para poder recuperarse totalmente, y en aproximadamente una semana ya estaba de regreso en el gimnasio.
También valora que pudo evitar la exposición innecesaria a otros pacientes.
“Por supuesto no quería exponer a nadie más, y además no quería contagiarme nada que fuera incluso peor”, dijo.
OHSU y otros centros de atención médica siguen exigiendo el uso de mascarilla y otras medidas para minimizar el riesgo de propagación del SARS-CoV-2 y otros virus —especialmente durante el pico de enfermedades respiratorias que observaron los hospitales de Oregón este invierno. Al mismo tiempo, los encargados del programa de OHSU dicen que los pacientes refieren que les parece bueno ahorrarse el traslado a una clínica de atención de urgencias o sala de emergencias para diversas afecciones que no necesariamente requieren un examen presencial.
Algunas afecciones comunes que se pueden atender a través del modelo virtual de OHSU incluyen:
- Enfermedades respiratorias como el COVID-19, infecciones de vejiga o del tracto urinario y conjuntivitis.
- Lesiones menores como cortes, esguinces y quemaduras.
- Problemas de la piel como quemaduras, picaduras de insectos o sarpullidos.
El programa, que comenzó en el otoño de 2017 como forma de ampliar el servicio a personas que prefieren las consultas virtuales, creció exponencialmente con la pandemia del COVID-19. En marzo de 2020, la cantidad total de consultas mensuales casi se cuadruplicó con respecto al mes anterior, para alcanzar casi 800.
“Cuando apareció el COVID-19, forzó a los pacientes a usar este tipo de atención y aprendieron a conocerlo”, dijo Ryan Morin, D.N.P., F.N.P.-B.C., instructor de medicina de emergencias en OHSU School of Medicine, con matrícula para atender pacientes en forma virtual en Oregón y Washington a través del programa. “Las actitudes y expectativas de los pacientes cambiaron”.
Aumento en la atención virtual
En efecto, las consultas de atención inmediata virtual se mantuvieron establece desde la pandemia.
De hecho, el ritmo se aceleró hacia fines de 2022, con casi 1000 consultas en el mes de diciembre, cuando estaba alcanzando su máximo la capacidad hospitalaria de toda la región. Los departamentos de emergencias estaban atestados con una ola de enfermedades respiratorias, sumado a la concurrencia de pacientes con otras afecciones que habían demorado su atención en las instancias anteriores de la pandemia.
“En diciembre de 2022 alcanzamos el volumen más alto de consultas virtuales en la historia del programa”, dijo Lauren Snyder, D.O., directora médica del programa y profesora adjunta de medicina de emergencia en OHSU School of Medicine.
El programa es ideal para pacientes como Pollock, que no necesariamente necesitan una evaluación presencial, añadió Stefanie Roland, administradora adjunta del departamento de Medicina de emergencia de OHSU.
El programa funciona particularmente bien con los pacientes mayores que inician tratamientos con medicamentos antivirales como el Paxlovid para tratar el COVID-19.
“Siempre que tengan una farmacia cerca, podemos ahorrarle el traslado al hospital”, dijo.
Los directivos del programa de OHSU dicen que las enfermedades de las vías respiratorias superiores representan aproximadamente tres cuartos de las consultas, y cada consulta virtual dura entre 20 y 30 minutos. En aproximadamente un 10% de los casos, una evaluación virtual inicial requiere una consulta presencial por cuestiones como tomar una radiografía o extracción de sangre.
Casi la mitad de los pacientes vuelven para consultas virtuales meses o incluso años después —lo que demuestra que avalan el servicio.
El personal del programa está conformado por un total de nueve profesionales clínicos que cubren turnos de 7 a.m. a 9 p.m. los días de semana, y de 8 a.m. a 8 p.m los sábados y domingos. Además, en este momento el programa es el único centro de Oregón que ofrece el medicamento antiviral remdesivir, un tratamiento para el COVID-19, en un entorno de tratamiento ambulatorio.
“Aprendimos que, si garantizamos el personal, recurren al servicio”, dijo Roland. “Los mismos pacientes lo recomiendan a sus hijos, a sus amigos y familiares”.