Investigadores de Oregon Health & Science University descubrieron que, a pesar de existir legislación en 19 estados que requiere que los seguros cubran un suministro de 12 meses de anticonceptivos, los/las pacientes no están recibiendo recetas de suministro para un año. La mayoría recibe solo tres meses o menos.
Su estudio, publicado recientemente en la revista JAMA Health Forum, muestra que las políticas que requieren cobertura de un suministro de 12 meses de anticonceptivos de acción corta (lo más común, la píldora anticonceptiva) no se han implementado por completo. Como consecuencia, no ha habido aumentos considerables a nivel nacional en las órdenes de receta para un año. Esto deja a muchos/as pacientes en riesgo de un embarazo no deseado.
Una causa frecuente de la eficacia disminuida de la píldora son las interrupciones en el uso, con frecuencia debido a que se acaba la receta o hay un lapso para obtener un resurtido. Sin embargo, despachar un suministro de más largo plazo de anticonceptivos (seis o doce meses) se relaciona con mejoras en el uso continuo, menos interrupciones de cobertura y ahorros para el sistema de salud.
"La decisión de cuándo o si embarazarse es profundamente personal”, afirmó la Dra. Maria Rodriguez, M.P.H., profesora de Obstetricia y Ginecología en la School of Medicine de OHSU y directora del OHSU Center for Reproductive Health Equity. "No debería verse afectada por una demora en comunicarse con la farmacia para un resurtido o un paquete de píldoras que se acabe durante las vacaciones".
Para abordar esta barrera, creadores de políticas en 19 estados han establecido políticas de suministro de anticonceptivos para 12 meses. Esto requiere que los seguros cubran el costo de despachar un año entero de cobertura por receta de una sola vez. Sin embargo, investigadores de OHSU hallaron que estas políticas no se han implementado por completo y no han cambiado las prácticas actuales de receta.
Con un modelo de "diferencias en diferencias", que compara cambios en resultados con el tiempo entre poblaciones, los investigadores examinaron las recetas de anticonceptivos en píldora, parche y anillo en casi 4.8 millones de mujeres de Medicaid inscritas de entre 18 y 44 años en 36 estados: 11 estados con la política de suministro de 12 meses, y 25 que no la tienen. Los investigadores hallaron que, en 10 de los 11 estados con esta política, el aumento en la proporción de anticonceptivos despachados fue inferior a un punto porcentual. Esto significa que hubo solo una mejora nominal en las órdenes de receta de un año.
"Nuestros hallazgos sugieren una brecha considerable de conocimiento tanto en pacientes como en quienes recetan, y esperamos que esto sirva como llamado a la acción para que el suministro de 12 meses se convierta en práctica estándar de receta", indicó Rodriguez. "Este es un camino fácil para mejorar el acceso a los métodos anticonceptivos, especialmente para personas que viven en estados con más restricciones en atención médica reproductiva".
Para que las políticas de cobertura sean eficaces, las compañías de seguro deben cumplir y hacerse responsables de seguir las pautas revisadas de cobertura, dijo Rodriguez. De manera similar, los profesionales clínicos/as deberán cambiar sus patrones estandarizados de recetas para recetar un suministro extendido de anticonceptivos y los farmacéuticos/as deberán entregar el suministro completo.
El equipo de investigación dice que la implementación plena de estas políticas requerirá dirigirse a usuarios de anticonceptivos, quienes los recetan, farmacéuticos y los pagadores, así como la exigencia de cumplimiento por parte de los gobiernos estatales. Una política a nivel federal que imponga la cobertura de un suministro de 12 meses sería otra estrategia para respaldar el acceso. Requeriría que todos los aseguradores, incluidos los privados, cubran suministros de anticonceptivos para 12 meses.
Rodriguez anima a que los/las pacientes se sientan empoderados para preguntar por sus opciones de anticonceptivos y abogar por opciones que se ajusten mejor a sus preferencias personales, estilo de visa y metas de planificación.
"En nuestro panorama actual de atención médica, donde los derechos reproductivos reciben constantes ataques, es fundamental derribar barreras y asegurar un acceso amplio a los anticonceptivos", dijo Rodriguez. "Necesitamos que los profesionales médicos/as sigan esta práctica de recetar de manera predeterminada, y que los/las pacientes sepan que tienen derecho a pedirla".
Este trabajo se hizo con el respaldo de Arnold Ventures. El patrocinador no tuvo ningún papel en el diseño y realización del estudio; ni en la recolección, gestión, análisis e interpretación de los datos; ni en la preparación, revisión o aprobación del manuscrito; ni en la decisión de presentarlo para publicación.